Paternalismo gubernamental.
Si hay algo que ha molestado permanentemente a los pueblos son las demostraciones de “paternalismo”, es decir de superioridad sobre el resto de la Sociedad, que pretenden demostrar generalmente las administraciones Gubernamentales.
La reacción es enteramente lógica, pues lo hacen con el poder delegado por la ciudadanía, suponiendo que no hay fraude o intervención electoral, y con la plata que se “exprime” con impuestos abusivos al pueblo.
Los chilenos no somos un hato de ignorantes a los que se pueda mantener “siempre” comulgando con “ruedas de carreta”, somos pacientes e ingenuos, pero nos damos cuenta cuándo existe el doloso intento de engañarnos.
Nos demoramos en reaccionar, nos hacemos los remolones, tratamos de encontrar explicaciones al no cumplimiento de los compromisos adquiridos, voluntariamente, por los políticos para ser elegidos a cargos importantes.
El problema, que nosotros vemos, es que resulta imprevisible vaticinar por donde va a reventar la “olla a presión”, que nos gustaría ver estallar por los cauces de la legalidad, usando solo las “armas” de la democracia.
Pensamos que el asunto se agrava ahora que el pueblo ha detectado que las preocupaciones de la administración no están por el lado del país, sino que son solo reactivas a solucionar los problemas de quienes pueden presionar.
Para aquietar las aguas no sirve ni la prepotencia, la arrogancia o la importancia que quiere darse el Ministro Francisco Vidal, es indispensable que la autoridad escuche la “voz del pueblo”, que expone las graves dificultades que vive.
La odiosidad ni los chistes de mal gusto del Secretario de Estado han logrado algo más que exacerbar a una oposición que no funcionaba, dándole alas hasta que realmente comprendieron cual era su función en la política.
Tampoco cooperan las “arrogantes” posturas que está tomando la Ministro de Educación, que nos está mostrando una faceta “totalitaria” que no demostraba ni por trayectoria ni por declaración de ideas.
Nadie quiere esa oposiciones en las que al que llegaba al Gobierno se le “negaba la sal y el agua”, a lo que espiramos los ciudadanos, a tener Gobiernos que lo hagan bien y tengan “oídos” para escuchar la problemática popular.
No creemos estar pidiendo demasiado o solicitando imposibles, solo estamos pidiendo a “nuestros representantes” que entiendan que tienen el poder por voluntad nuestra, por lo que se deben a nosotros.
Las autoridades tienen la obligación de cuidar sus dichos, en caso contrario no alcanzan a demorar 24 horas antes de tener que desmentirse ¿O no Vidal?, Recapacite sobre sus dichos Ministro Jiménez, capáz que Ud. sea la siguiente.
