(Mario Montes, Director de Reacción Chilena.)Irracionalidad en la concertación.
Insistimos en que la concertación no entendió el mensaje ciudadano expresado en las urnas de votaciones, y si lo entendieron parece que son refractarios a la opinión del pueblo.
Los chilenos señalamos a los políticos nuestro cansancio de una politiquería de escaso alcance, de las oposiciones por las oposiciones y de las peleas inconducentes y sectarias.
Los anuncios concertacionistas en el sentido que serán una oposición dura al Gobierno de Piñera es una demostración clara de una sordera voluntaria que a nada bueno puede conducir.
La oposición es necesaria, sobre todo porque debe ejercitar puntillosamente la fiscalización al Ejecutivo y representar a las minorías que también tienen algo que decir en el proceso gubernamental.
Las oposiciones ciegas no conducen a nada bueno, porque demuestran que los opositores son más leales a los intereses de sus colectividades políticas que comprometidos con el futuro nacional.
No nos parece lógico que quienes han estado en el poder por dos décadas, teniendo una oposición constructiva, al pasar a la otra vereda pretendan negarle la sal y el agua a quienes les derrotaron.
No nos parece aceptable que en el país existan posiciones totalitarias que pretendan una oposición irracional antes siquiera de darle la oportunidad al nuevo Gobierno de demostrar sus capacidades.
Recordamos a los concertados que posiciones como las que han anunciado fueron las que llevaron a Chile a un doloroso quiebre institucional, que tan doloroso resultó para los chilenos.
Chile requiere de forma urgente que nos pongamos todos a trabajar para lograr el desarrollo y por esta vía lograr derrotar a la pobreza y dar oportunidades a los jóvenes de nuestra Patria.
Insistimos en que la concertación no entendió el mensaje ciudadano expresado en las urnas de votaciones, y si lo entendieron parece que son refractarios a la opinión del pueblo.
Los chilenos señalamos a los políticos nuestro cansancio de una politiquería de escaso alcance, de las oposiciones por las oposiciones y de las peleas inconducentes y sectarias.
Los anuncios concertacionistas en el sentido que serán una oposición dura al Gobierno de Piñera es una demostración clara de una sordera voluntaria que a nada bueno puede conducir.
La oposición es necesaria, sobre todo porque debe ejercitar puntillosamente la fiscalización al Ejecutivo y representar a las minorías que también tienen algo que decir en el proceso gubernamental.
Las oposiciones ciegas no conducen a nada bueno, porque demuestran que los opositores son más leales a los intereses de sus colectividades políticas que comprometidos con el futuro nacional.
No nos parece lógico que quienes han estado en el poder por dos décadas, teniendo una oposición constructiva, al pasar a la otra vereda pretendan negarle la sal y el agua a quienes les derrotaron.
No nos parece aceptable que en el país existan posiciones totalitarias que pretendan una oposición irracional antes siquiera de darle la oportunidad al nuevo Gobierno de demostrar sus capacidades.
Recordamos a los concertados que posiciones como las que han anunciado fueron las que llevaron a Chile a un doloroso quiebre institucional, que tan doloroso resultó para los chilenos.
Chile requiere de forma urgente que nos pongamos todos a trabajar para lograr el desarrollo y por esta vía lograr derrotar a la pobreza y dar oportunidades a los jóvenes de nuestra Patria.
