Se agrava crisis del crédito.
Nosotros pensamos que ya está aquí.
A pesar de las medidas tomadas por los Institutos emisores, Bancos Centrales, pareciera que la infección de los créditos sub-prime norteamericanos se extiende de manera acelerada, anunciando la llegada de momentos dramáticos para inmensos grupos humanos, en especial para aquellos que se encuentran sobre-endeudados.
Al desinfle de la "burbuja inmobiliaria" norteamericano se suman la situación, bastante similar que se está produciendo en España y en Gran Bretaña, países en los que al igual que en USA pensaron que las propiedades seguirían teniendo inmensas plusvalías sin ningún tipo de límites y por tiempos indeterminados.
El sueño se está derrumbando, pues a pesar de las rebajas de los intereses que han decido los Gobiernos, los deudores privados, de créditos generosamente concedidos y sub-garantizados, ya no pueden seguir pagando, lo que ha desatado una ola de remates de propiedades, baja en los precios e insolvencia de muchos bancos.
Creemos que por el afán de los Gobiernos de mostrar "éxitos" se han relajado de manera funesta los controles de concesión de créditos, llegándose al absurdo de la "plata fácil", fomentando la manera "disimulada" de emitir dinero por la estimulación del billete "plástico", es decir las tarjetas de crédito.
Nosotros no creemos que existan instrumentos financieros malos per se, pero de lo que si estamos seguros es de que hay malas aplicaciones, que tarde o temprano llevan a toda la sociedad a asumir los costos de la irresponsabilidad de las Autoridades, que no controlan, y de Bancos y Financieras que se "despreocupan"
La situación chilena, que parece "tranquila" a nosotros nos parece explosiva, pues a una cantidad enorme de tarjetas de crédito bancarias y de grandes tiendas, se agrega un sobre endeudamiento inmenso de los usuarios, llegándose a situaciones increíbles de estar endeudándonos para las compras de supermercado.
Con la "precaria" situación que están viviendo las pequeñas y medianas empresas, con el cierre de muchas actividades, sean productivas o de servicios, es previsible la pérdida de muchos puestos de trabajo, lo que obviamente tendrá una gran incidencia en la recuperación de estos créditos.
Para terminar esta pequeña "radiografía" diremos que la situación se agrava mucho más por los intereses usurarios con que está funcionando el sector crediticio, en especial las tarjetas de crédito, en el que la deuda sube con tal rapidez que los ingresos no logran estabilizarse, presagiando una tremenda crisis de pagos.
Buscaremos la forma de imputar a los mercados externos de lo que sucede, se intentará denunciar a sectores internos por la situación, nosotros pensamos que las Superintendencias del tema y el Ministerio de Hacienda, más el Banco Central, han mantenido una inactividad culposa, que les responsabiliza de lo que viene.
Lamentablemente, la crisis se nos viene encima, bajo la mirada irresponsable de Autoridades que nada han hecho para evitarla, pero que han puesto bastante combustible a la hoguera para acelerar las situaciones conflictivas, las que como siempre serán pagadas por la clase media y los más humildes.