La cocina política contingente,
por Sergio Melnick.
En la cancha política se juegan siempre los temas de largo plazo, los importantes, y los de corto plazo, los urgentes. El largo plazo obviamente existe sólo si se sobrevive en el presente, en la pelea corta. La pelea grande en Chile es la educación, el crecimiento económico y el empleo, la modernización del Estado, la delincuencia, la unidad nacional, la descentralización, la ciencia y tecnología.
A mi juicio, en este momento, se juegan cinco grandes temas en la cancha política.
El primero es la definición e identidad de la «Coalición por el Cambio». Hoy sólo huele a Alianza, y en el imaginario colectivo eso significa derecha. Ello no tiene nada de malo en sí, pero es una manera de jugar el partido. Chile Primero no se mueve, el PRI está también ausente del debate público, los independientes pololean a dos bandas o más. No hago aquí juicio alguno, sólo establezco que es un tema que se debe definir pronto, no más allá de julio, ya que de otro modo se instalan ideas en la población que son muy difíciles de mover después. Es como la composición del equipo para el Mundial, en este caso de la política nacional.
El segundo tema es el destino de la Concertación. Todos, sin excepción, estiman que debe cambiar, reinventarse, redefinirse o evolucionar. Las diferencias y pugnas contenidas por 20 años emergen hoy sin piedad. La derrota es demoledora cuando se consideraban destinados a gobernar. Habían hecho del gobernar una forma de vida, y esa fue la semilla de la propia destrucción. El síndrome Tironi aparecerá una y otra vez. El fue el gran «genio» de la campaña, pero fueron todos los otros los que se equivocaron. Qué tal. Sálvese quien pueda. Paralelamente, MEO, sindicado por muchos como el gran culpable, y crítico acérrimo de la Concertación, astilla del mismo palo, arremete tratando de formar un nuevo referente, usando todas las banderas de la Concertación. Si lo logra, la cosa se complica para ésta. Y si no lo logra, también. Se juntaron en abril, para no juntarse. Se saludan para no hablarse. Hasta un “reality show” hubo en el PPD, que termina en ruptura matrimonial. A pesar de todo, son pocas caras nuevas. En fin, se juega el destino de la Concertación como tal, tema que creo durará unos seis meses más de prueba y error. El pronóstico es malonzuelo.
El tercer gran tema en juego es la posición que pudiera tomar la UDI como partido de gobierno. Mal que mal, la UDI es el principal partido político en Chile, posición que quiere mantener y ojalá subir. Se lo ha ganado a punta de trabajo y coherencia. Por eso mismo está ahora complicada. Es un caso similar al de la DC, que perdió un millón de votos aliada con la izquierda, su enemiga ancestral. Pero ahí estuvo y gobernó, tuvo presidentes y grandes responsabilidades. La política es el arte de trabajar con lo imperfecto, no de lo perfecto. Por eso siempre hay algún desgaste político en los gobiernos. No soy nadie para aconsejar a la UDI, donde tengo grandes y admirados amigos, pero creo que es tiempo de buscar la sabiduría, no la técnica.
El cuarto tema en el frente, es la fortaleza y duración del primer gabinete. En nuestro típico juego político nacional, la oposición debe naturalmente buscar la fractura y cambio de gabinete antes de 6 meses. El Presidente debe defenderlo, pero no a cualquier costo político y ahí está la pugna. El actual gabinete es francamente de lujo, y un notable cambio de modelo a lo que habíamos conocido en las últimas décadas. Por ello mismo ha sido curiosamente cuestionado por ambos lados: de adentro y de afuera. Vale la pena darle la oportunidad, y defenderlo con vehemencia, pero es un tema en disputa.
Finalmente, el quinto tema, que es permanente, es el control de la agenda pública. Hoy está un poco abierta, y muy forzada por el terremoto. A todo evento, está levemente inclinada al control del gobierno, además recién instalado. Pero la Concertación hace sus esfuerzos por tratar de controlarla, lo que es natural. Tironi desestabilizó seriamente a esa coalición. Tocó fuertemente la figura de Bachelet, mostrando que el rey estaba desnudo. Despedazó a los partidos, y sepultó a Frei. Uf. MEO trata de figurar pero no puede. Los parlamentarios tratan de frenar iniciativas legislativas. Piñera prepara andanadas de temas... Todo esto se ordena el 21 de Mayo, en que el Presidente formalmente trata de instalar su agenda, y la oposición de bloquearla o capturársela.
Lo importante es que no perdamos de vista el bosque, que es la pelea del largo plazo.