Algunos personajillos, como el Diputado Plata.
Algunos personajes simplemente dan risa ese es el caso del Diputado de la Democracia Cristiana Gabriel Silber, que calló y tapó todos los incumplimientos e irregularidades de los Gobiernos de la concertación y ahora quiere convertirse, a menos de 90 días de asumido el Gobierno de Piñera en una especie de censor del cumplimiento de las promesas electorales.
Tenemos claro que a este tipo de personas no se les puede pedir consecuencia ni tampoco se les puede exigir que tengan algo de sentido del ridículo, como las polillas andan buscando los focos de la televisión y los flash de las cámaras aunque no tengan nada que decir, por lo que generalmente se les escucha palabras inconexas e ideas de escasa inteligencia.
Por si este señor no se ha dado cuenta el periodo de Piñera recién esta comenzando, solo a un cretino se le puede ocurrir que a 75 días de asumir, con una inmensa catástrofe de por medio, con un traspaso de mando en el que hasta le borraron las memorias de los computadores, se puede cumplir todos los compromisos adquiridos en el periodo eleccionario.
Don Gabriel Plata parece representar a esos grupos, lamentablemente muy extendidos dentro del ambiente de la política, dedicados a denostar a sus adversarios, seguramente porque carecen de capacidades para argumentar las diferencias, que esperamos pronto queden fuera de la vida pública porque, tristemente desprestigian a una actividad tan necesaria.
Nos preguntamos donde queda su filiación demócrata, a la que simplemente desacredita con sus actuares, y en que recóndito rincón dejó oculto el cristianismo, que dice profesar, cuando ni siquiera es capaz de entender que hay urgencias más importantes que aquellas que son objeto de su burdo apuro por calificar a un Gobierno recién llegado.