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miércoles, 9 de septiembre de 2009

El voto arma muy poderosa.....


Vota castigándoles........

Hasta el Lunes hay plazo para inscribirse en los registros electorales y hacerse participes de las decisiones que el país debe tomar en diciembre, después del cierre de las inscripciones no habrá siquiera el derecho a pataleo por las resoluciones que tomen los que han cumplido con el sagrado derecho a emitir opiniones.

Los que se han auto marginado de proceso, sea por lata, dejación, desinterés e inclusive desidia, están cargando sobre los hombros del resto sus responsabilidades, lo que, ciertamente les inhabilita hasta para quejarse de las malas Administraciones y les impedirá, en la eventualidad que lo hagan bien, felicitarse por el buen ojo.

Chile nos impone pocas cargas, fuera de impuestos leoninos, entre las que se encuentra el derecho, que sentimos como un deber, de seleccionar a quienes asumirán los cargos de responsabilidad en la Administración del país, a aquellos que nos representarán en las tareas legislativas y a quienes manejarán los Gobiernos locales o Municipales.

No es culpa del sistema que nosotros nos neguemos a participar, como pretende insinuar el Gobierno de Bachelet y la concertación, las responsabilidades son compartidas entre una clase política que ha dado claros síntomas de corrupción e incapacidad y de un pueblo que poco se preocupa de su futuro.

Nuestro voto, un arma de extraordinaria potencia sancionadora, debe determinar si quienes han ejercido el poder lo han hecho bien y si han cumplidos los “ofertones” electorales que nos han ofrecido en las campañas, si no, simplemente debemos cambiarlos dándoles a otros la oportunidad de hacerlo mejor.

Si revisamos las promesas de nuestras actuales Autoridades Nacionales, veremos que no han cumplido sus compromisos, la prueba es que después de 20 años seguimos esperando esa alegría que nunca llegó, pasando por variados eslóganes bonitos, pero vacíos, que culminaron con la promesa de Bachelet de estar con nosotros.

Hoy los candidatos oficialistas, a todos los cargos, y aquellos que durante casi 20 años fueron cómplices de los latrocinios de la concertación, nos ofrecen nuevas ilusiones, mientras desde el Gobierno la Presidente nos dice que hay casos en que más de lo mismo es bueno, en otro acto grosero de intervención electoral.

Es cierto, siendo rigurosos, que no da lo mismo quienes estén en el Gobierno, sobre todo después de comprobar la brutal ineficiencia, soberbia, falta de honestidad, falsía e injusticia que han instaurado en nuestra Patria, lo que sin duda hace patente la necesidad imperiosa de la alternancia en el poder.