martes, 15 de abril de 2008
Algunas ideas para comenzar el cambio…..
Para muchos la confrontación de ideas tiene que hacerse con altura de miras, con argumentos serios, con posturas doctrinales definidas, con la necesaria cuota de respeto y ciertamente, también, con la correspondiente fracción de vehemencia que tenemos todos los seres humanos.
Sin duda, ese intercambio de ideas, del que todos podemos aprender, no es el que tenemos en nuestra política, básicamente porque este estamento ha sido permeabilizado por el odio, infiltrado por la descalificación y afectado de una especial sordera que no permite escuchar a los que disienten.
En consideración a lo anterior, a una perdida de respeto creciente, la prensa amarilla ha tomado cada vez más preponderancia, hemos reemplazado la noticia por el escandalillo del día y las argumentaciones por una diatriba llena de descalificaciones para con los rivales y sus planteamientos.
Para constatar esto basta pararse en el quiosco de Diarios y leer los titulares de algunos rotativos o las gacetillas de algunos semanarios, que en una pretensión humorística caen en el insulto, el descrédito y descabelladas acusaciones, por demás bastante antojadizas.
Es cierto que nosotros también somos frontales, si, pero es distinto ser frontales a ser falsarios. Interpretamos las noticias a nuestro, arbitrio, también es cierto, pero nunca jugamos con los antecedentes ni tampoco las “amononamos” para que sirvan a nuestra causa.
Nosotros no creemos que la información haya que “cuadrarla” a la fuerza con los pensamientos de cada quien, lo que si sabemos es que la gente requiere interpretaciones más libres, aunque no necesariamente más objetivas, que muestren las realidades desde otros puntos de vista.
No tratamos de ser “chistosos”, aunque en algunos casos las ironías nos salen solas al ver el actuar de algunos, la soberbia con que se mueven o la prepotencia con que tratan a aquellos de quienes se dicen sus defensores. Pero siempre decimos “nuestra” verdad.
Quien pretende que la verdad es única y que solo está en lo que el siente o prédica, es ciertamente un totalitario, que está preparando el camino para dar un zarpazo a nuestros derechos e intentar restringir todas nuestras libertades que tanto nos han costado.
Con nosotros, y es lo mas seguro, puede estar en desacuerdo, opinión que respetaremos totalmente, aunque argumentaremos en contrario o se podrá estar de acuerdo, pero siempre de debe tener la seguridad de que actuamos de frente, nada tenemos que ocultar ni tenemos mayores temores.
Sabemos que se usa la “fuerza”, sea esta la del dinero, las instituciones o la bruta de los organismos represivos, porque la hemos sufrido en carne propia, pero no la tememos, pues nuestra confianza en el Altísimo nos da las fuerzas espirituales para la lucha.
En estos momentos en Chile hay mucha gente que lo pasa mal como los desempleados, los pequeños y medianos empresarios, los injustamente presos, los enfermos, entre muchos, a quienes dedicamos nuestra lucha y los desvelos que tenemos.
Chile es un país maravilloso, habitado mayoritariamente por gente excelente y productiva, que lamentablemente tienen gobiernos que se farrean las posibilidades de surgir, sea por su sectarismo o por sus ya muy notorias incapacidades.
Tenemos de todo, un territorio hermoso, que ciertamente junta casi todos los climas, grandes cantidades de materias primas, una naturaleza privilegiada, sea para la agricultura, la crianza animal o el turismo, solo nos falta ponernos en marcha.
Creemos que es época ya de iniciar el camino, que como es obvio debemos intentar reemplazar a la dirigencia que está encabezado hoy la administración, sea desde La Moneda, el Parlamento o el Judicial, procurando que los cargos sean ocupados por los que se la pueden y que además quieren llegar al desarrollo.