Alimento para el alma…y una petición de Justicia.

Alimento para el alma…y una petición de Justicia.

Tuvimos la oportunidad de ir en el día de ayer al teatro de la Escuela Moderna de Música y Danza, donde se hizo un homenaje a Don Vicente Bianchi Alarcón con motivo de haber sido postulado para el Premio Nacional de Música 2014.

Los que supimos del evento, repletamos el local, y tuvimos la suerte de ver a este inspirado maestro musical tocando el piano, dirigiendo a su Coro Santa Marta y realizando, durante casi dos horas, un impresionante concierto de música latinoamericana y chilena.

Música sacra, docta y popular se encuentran entre las más de 300 creaciones de don Vicente, que al poner melodía a parte de nuestra historia la puso al alcance de todos nuestros compatriotas haciéndonos sentir orgullo de nuestros  héroes patrios.

La misa a la chilena, la misa sudamericana, los sones de distintas zonas de nuestra Nación, canciones de Margot Loyola, de Nicanor Molinare, musicalización de versos de Pablo Neruda, entre otros, convirtieron la noche en mágica.

Lo grandioso vino al final, este gran Maestro de nuestra música, sigue creando y está trabajando fuerte para entregar nuevas obras sobre nuestra historia, nuestra cultura y las costumbres de nuestro pueblo.

Desde esta página recordamos a nuestras autoridades que han sido remisos, por consideraciones subalternas, a premiar a este gran músico con el Galardón que merece, el Premio Nacional de Música,  que reconozca  su destacada trayectoria.

Entramos a la sala como chilenos enamorados de nuestra Patria, salimos de ella flotando entre una nube virtuosa de satisfacción sensorial, con admiración a nuestro pasado y con el corazón henchido de amor Patrio.